Ante el miedo al silencio,
No calles,
Alma mía,
Grita y libera tu alma,
Deja que mis oídos te oigan,
Llamarme una y otra vez,
Que mi sed sea tu triunfo,
Triunfo de amor y vida,
Que sea lo que pareces ser,
Un ángel de alas arrancadas,
Tu camino va a hacia mí,
Y allí en lo más profundo del bosque,
En el silencio absoluto,
Llámame,
Tu grito será mi nombre.